País de interinatos, huelgas, bloqueos y referéndums

Desde que asumió la presidencia de Bolivia el actual gobernante, se están realizando designaciones de servidores públicos (improvisaciones de masistas con total desconocimiento de lo que tienen que hacer como funcionarios públicos) convirtiéndose en un país de interinatos, porque los allegados a diferentes autoridades siguen siendo designados en forma interina supuestamente por tres meses, pero siguen sin respetar disposiciones legales hasta la fecha, dejando de lado a funcionarios que fueron capacitados para desempeñar funciones, sin pensar que estos cambios políticos en vez de mejorar el servicio de las oficinas públicas, fueron bajando considerablemente el nivel del servicio y subiendo la soberbia de estos políticos oportunistas .El país por estas razones sigue siendo subdesarrollado, tercermundista por culpa de los políticos de ayer hoy y siempre, qué se refleja en el pésimo manejo de la administración pública por los interinatos e improvisaciones.Nuestra patria en los últimos años producto de los múltiples movimientos sociales, especialmente en el actual Gobierno, por las autonomías, Asamblea Constituyente, consultas por estatutos; se ha convertido en un escenario permanente de confrontación entre masistas y menistas en diferentes escenarios, se instalan huelgas, no existe un día en el que no existan bloqueos por todo y nada que generan enfrentamientos entre las nuevas barzolas de los azules y verdes, por falta de seriedad y cumplimiento a los compromisos suscritos con el pueblo.Según una lectura política de Bolivia ,los conflictos se han ido produciendo por el llamado empate catastrófico entre los oficialistas y opositores, quienes por su ceguera política no visibilizan ventanas de oportunidades que saquen al colectivo de su extrema pobreza por falta de fuentes de trabajo, lo cierto es que los payasos del actual circo (oficialistas y opositores) no piensan en ningún momento en el pueblo boliviano y sus múltiples necesidades.Ningún boliviano quiere tener un país de caos y anarquía donde no exista principio de autoridad, es imprescindible que de una vez se pare el odio, racismo, discriminación, violencia enfermiza que se inicio entre t’aras y k’aras siendo los directos afectados la clase media, por no ser rojos ni morados, que analizan desde otra visión la actual coyuntura que tiene ribetes de violencia constante el modelo centralista, por que los payasos actuales se olvidaron de tener un estado moderno. Como consecuencia de la terquedad de los políticos supuestamente descansaría en paz, la mega coalición, ahora existe la democracia pactada entre el MAS, el movimiento sin miedo y otros taxi partidos, todos los intentos de dialogo fracasaron por la soberbia de ambos lados.En nuestra patria como si fuera un estado con ingentes recursos económicos se ha ido poniendo de moda los referéndums, mecanismo institucional de consulta al pueblo, como el que se realizará el 10 de agosto, (que esta en duda) donde el soberano definirá con sabiduría si se revoca a los nueve prefectos y al mismo presidente junto a su vicepresidente.Los políticos ya nos tienen cansados con sus payasadas porque estos referéndums sirven tan sólo para distraer al pueblo, los múltiples problemas que tiene el pueblo requieren verdaderas soluciones, mientras no exista en los políticos de turno verdadero cambio de mentalidad, seguirán llevando al desastre a nuestro país.El MAS y la oposición con el referéndum están haciendo un cálculo político jugando con el hambre y pobreza del colectivo social.Los politiqueros están enfrascados entre si, olvidándose de la inflación que está sembrando hambre y miseria en el pueblo boliviano.El referéndum no solucionará la actual crisis política en la que está sumida el país y tampoco es novedad de que existe una división total en toda la clase política como sucede en el partido gobernante donde todos quieren tener la hegemonía del partido y la repartija de pegas.
(*) Abogado