Editorial El Mundo: Cual es el camino

De mi experiencia por mi paso en la cárcel, recuerdo un graffiti en el cual se leía: "Cuando la justicia tarda ….ya no es justicia" Recuerdo un miércoles 7 de mayo me encontraba en un curso en Buenos Aires cuando una llamada me alertó de la decisión de el Senado de viabilizar la ley del referéndum presentada por el Presidente pocos meses antes ante Diputados, recuerdo que mi primer decisión fue la de entrar a un cabina de Internet y hacer un editorial donde denunciaba una maniobra de la moribunda clase política (no solo Podemos votó sino también el MNR y UN) que respondiendo hormonalmente por los resultados que Santa Cruz obtuvo en la aprobación de sus estatutos autonómicos, reaccionó desesperada por que por decisión de los votos se les escapaba de las manos la posibilidad de que el estado era simplemente una forma de vivir, de medrar, de obtener poco decentemente el poder para todo. Mi protesta simplemente se enmarcaba en la decisión de hacer un referéndum solo como forma de darle oxigeno en la boca al MAS por parte de hasta entonces sus "eventuales" adversarios, que después de la ley se transformaron en sus amigos íntimos, de alcoba, silenciosos pero al fin y al cabo sus salvadores, lo grave nos enteraríamos después pasando los días cuando en la gaceta se publica el "mamotreto" ilegitimo absurdo y aberrante que de un plumazo se hipotecó la democracia y se dio una patada a la universalidad de la democracia sobre lo de mayorías y minorías, se basa en un voto por encima del 50%, que es distante a lo aprobado en el Senado donde mediante dos factores que son de ¿votos y porcentajes sobre una antigua elección? Donde sin ruborizarse algún prefecto obteniendo una votación por encima del 63% podría salir perdiendo, cuando nos enteramos lanzamos piedras a los cristales para impedir la estafa electoral. Los partidos asi como en el cuento de "que estás haciendo lobo, lobito" se preparaban para afilar cuchillos para degollar a la democracia, las victimas de este festín -los prefectos- entraron en las idas y venidas, en ver las posibilidades y desventajas, buscaron encuestas y decidieron por una cosa y luego optaron por otra, nunca se aferraron a la ley vigente que es la constitución política del estado, su discurso y posición debió ser por la legalidad, por la legitimidad, por el respeto a la constitucionalidad de una "ley" aprobada por los senadores, mientras tanto el gobierno se lanzó a respirar de nuevo y se puso a hacer lo único que sabe: campaña y mas campaña donde regalando espejos cheques y promesas se fortaleció y empezó hablando fuerte, acusando y persiguiendo a quienes se oponían a ellos, sus perros de cacería como Exeni, -y otros- decidieron convertir a Evo en un ilegitimo gobierno, la autoridad que se desmarca de la ley deja de serlo para convertirse en un violador de tipificaciones legales, y se coloca -y se enfrenta- a la ley desconociendo disposiciones vigentes como la asumida por una miembro del Tribunal Constitucional que congeló el referéndum hasta que el Tribunal Constitucional mediante sala plena decida por la causa de fondo que es la continuidad de dicho referéndum , esa opinión fue refutada por los omisos de la ley del orden y de la constitución.