Editorial La Prensa: USAID y el deterioro de las relaciones con Estados Unidos

En un reciente editorial nos referimos al alarmante deterioro de las relaciones con los Estados Unidos y la necesidad impostergable que tiene Bolivia, como nación vulnerable, frágil y dependiente, de llevarse bien con la primera superpotencia mundial. Pasados varios meses, la cosa tiende a empeorar. El Embajador del país del norte hace rato que se encuentra en Washington para “consultas”, en una clara manifestación de disconformidad con lo sucedido últimamente, cuando se intentó tomar las oficinas de la representación diplomática en La Paz. A ello se agregan las constantes acusaciones —sin pruebas fehacientes— de “conspirar”. En este de por sí preocupante cuadro, se inserta ahora el pedido de expulsión de las oficinas y centros que tiene en el Chapare la Agencia Internacional para el Desarrollo de EEUU, más conocida como USAID. No hace falta tener el talento del mítico detective Sherlock Holmes para percibir que la exigencia cocalera en el Chapare seguramente mucho tiene que ver con la “necesidad” de tener rienda suelta para promover mayores cultivos de hojas de coca que serán potencialmente dirigidos hacia el narcotráfico, actividad que en nuestro país está llegando ahora a niveles verdaderamente alarmantes, como lo consignan varias estadísticas nacionales e internacionales. La asistencia norteamericana para Bolivia durante el año 2007 ascendió a la importante suma de 124 millones de dólares, de los cuales casi 35 millones fueron orientados a temas vinculados a los narcóticos. El resto se ha distribuido en rubros de salud, asistencia para el desarrollo, fortalecimiento de la democracia, educación y seguridad alimentaria. No es poca cosa lo recibido. Por otro lado, USAID ha sido pionera y pivote esencial de instituciones muy útiles, tales como Pro Salud y un banco del sistema. Pro Salud es modelo de acceso a servicios médicos con costos accesibles y la entidad bancaria, hoy de renombre, fue pionera en el campo del microcrédito, aspecto tan importante en estas épocas de inclusión social y económica. Ambas instituciones fueron formadas mediante los sistemas de cooperación de USAID. Por lo visto y escuchado hasta ahora, el Gobierno dice que “respeta” las decisiones de los llamados “movimientos sociales” propiciadores de la expulsión de USAID del trópico cochabambino. Éste es un paso más en la escalada contra todo lo que provenga de Estados Unidos y, desde ya, sin medir las consecuencias. Lamentablemente, se prosigue una arremetida plagada de adjetivaciones insultantes contra EEUU y se rechaza la valiosa ayuda de USAID, desconociendo lo mucho que ha desarrollado en el país, especialmente en la zona del Chapare.
Fuente:
http://www.laprensa.com.bo/noticias/27-06-08/27_06_08_edit1.php