Se cae la estantería chavista

Ingresamos al séptimo mes del año y vemos, como, poco a poco, la estantería del MAS “chavista”, se cae por efecto del rechazo a su política draconiana, cruel e inconsecuente con el pueblo boliviano.Día que pasa, es mayor la repulsa hacia este Gobierno que sólo busca, con afán desmesurado, el enfrentamiento entre hermanos, para dejar a Bolivia en manos del socialismo indignante que encabeza Hugo Chávez Frías.Para vergüenza de los bolivianos, nuestro Presidente acude a foros internacionales, haciendo escuchar sus lloriqueos pidiendo ayuda para salvar su gestión gubernamental, sabiendo que aquí, ya no lo quieren como Primer Mandatario.Ni un niño de escuela, por la dignidad que tiene, adoptaría esa humillante postura presidencial, lo cual, pone a don Evo Morales, en el mayor ridículo ante el contexto internacional.Lo que pasa es que el gobierno del MAS, ha perdido credibilidad, porque su administración es errónea, al haber descuidado en gran medida los postulados democráticos con los cuales se debe conducir una república.Que yo sepa, nadie quiere derrocar a Evo Morales, porque él solo y su partido, caen del falso pedestal en el que se encumbraron, creyendo ser los dioses intocables.Gracias a la desafortunada actitud de don Evo, la nación está desacreditada, habiendo quedado aislados de todo proceso integracionista, solidario y mancomunado.Señor Presidente, por sus afirmaciones, Bolivia se ha convertido en inviable para recibir inversiones extranjeras que posibiliten su mejora económica, al quedar marginados de un desembolso de mas de 800 mil millones de dólares que se tiene programado para este periodo y los siguientes.Este ejemplo nos pone tristes, siendo imperioso que cada ciudadano, hagamos un examen de conciencia, buscando mejores derroteros hasta lograr instaurar un gobierno verazmente nacionalista, que comulgue con los intereses de todos los bolivianos sin distinción de clases.Parece que ese camino ya vamos recorriendo con el resultado de las elecciones en Chuquisaca, porque no deseamos seguir viviendo en medio de la incertidumbre, la violencia, el matonaje, el atropello, el vejamen, en el que nos tiene acorralado don Evo Morales y su séquito con sed de ver más muertos.Resulta doloroso evidenciar, como, el Jefe de Estado, en lamentable conchabo, sigue los mandatos del presidente venezolano, el mismo que habla en nombre de Bolivia cuando hay eventos internacionales.Ello permite al dictador caribeño tener a don Evo como su criado, debiendo actuar tal como le dice su “amo”, lanzando adjetivos de fiereza inhumana contra países hermanos, con el fin de inquietar los ánimos para llevar adelante una guerra terrorista en Sudamérica, bajo la batuta del mandamás venezolano.Respetado señor Presidente, Bolivia no está para esos menesteres, siendo incongruente que a nuestras fuerzas armadas, con el pretexto de tener convenios firmados, se las arrastre a una futura conflagración bélica de graves consecuencias, que solo caben en mentes alocadas como las de su colega venezolano, que pretende erigirse como el Napoleón Bonaparte latinoamericano..Utilizando como escenario la reunión del Mercosur, Chávez sostuvo que desde el “imperio”, se estaría confabulando contra nuestro Gobierno. Este señor, dada su formación beligerante y petulante, puede decir lo que quiere, pero nunca podrá ocultar ante todo el hemisferio mundial, que existe una intromisión venezolana en el manejo del Estado nacional, al punto de amenazar convertir a Bolivia en otro Vietnam.Eso no lo olvidamos y estamos dispuestos a luchar contra toda invasión de mercenarios chavistas a nuestro territorio, que hoy, por efecto de su descarado entrometimiento, confrontamos, al igual que en la tierra de Simón Bolívar, una inflación galopante, siendo imposible llevar el suficiente alimento para saciar el hambre de nuestros hijos.Por efecto de la insania de Chávez, Bolivia es un babel, donde la fuerza maligna del Movimiento Al Socialismo, considera haberle llegado la hora de ahogar en sangre el patriotismo y el derecho a vivir en completa libertad.Por tanto, es completamente falsa la solidaridad venezolana con el pueblo, porque el dinero que envía su gobierno, es para fomentar el encono y odio entre bolivianos , siendo parte, inclusive, de un plan para atemorizar a los medios de comunicación y periodistas que luchan para que Bolivia no sea satélite comunista de Hugo Chávez Frías.
Fuente:
http://lapatriaenlinea.com/index.php?option=com_content&task=view&id=2619&Itemid=33