La Constitución Política del Estado (CPE) no es una norma cualquiera, es el contrato social básico que rige la vida en común de los ciudadanos de un Estado.
El contrato social, como teoría política, explica el origen y propósito del Estado y de los derechos humanos. La esencia de la teoría propuesta por J.J. Rousseau (1712-1778) es la siguiente: Para vivir en sociedad, los seres humanos acuerdan un contrato social implícito, que les otorga ciertos derechos a cambio de abandonar la libertad de la que dispondrían en estado de naturaleza.
Por tanto, la CPE es una institución que requiere un alto índice de consenso. ¿Qué pasará si el referéndum del 25 de enero no gana con una mayoría categórica (sin fraude) o si en varios departamentos lo rechazan?
La Constitución no puede ser impuesta por el cerco armado a Santa Cruz, ni por el cerco de minorías violentas al Congreso, o negociada en oscuras mesas clandestinas. ¡Por lo menos en un país normal!
Aunque son muchas las razones que tengo para votar contra el proyecto de “Constitución pactada”, me limitaré a enumerar sólo cinco de ellas:
1) Las ilegalidades del proceso.- Se violó la actual CPE, la Ley de Convocatoria a la Asamblea Constituyente (AC), los reglamentos de la propia AC. Se elaboró el texto en un cuartel militar, no se aceptó la discusión de capitalidad y se votó sólo por el índice.
Es decir, se violaron todas las leyes. La única que no pudieron violar fue la Ley de la Gravedad, y no porque no lo hubieran intentado. O si no pregúntenle a Román Loayza, que terminó dándoles afanes a los neurocirujanos cívicos, que le salvaron la vida en Santa Cruz.
2) La autonomía trucha.- Lógicamente no podía ser de otra manera, si el propio presidente Morales hizo campaña contra ella, Georges Nava incluido. Aunque hoy, con una hipocresía sólo digna de ellos, dizque la apoyan. ¡Hoy los paladines de la autonomía son los centralistas! Un insulto a la inteligencia y a la verdad.
3) La CPE racista.- Es la primera CPE racista del mundo. Se otorgarán privilegios con criterios étnicos. Con ella, los indígenas tendrán “derechos especiales”, violando la premisa universal de la igualdad de los ciudadanos ante la ley. Habrá bolivianos de primera y de segunda. ¡Un monumental retroceso histórico!
4) El modelo económico retrógrado.- Insisten en un modelo neocomunista; con el eufemismo de “comunitario”, que ya mostró sobradamente su fracaso en otras latitudes. Los nostálgicos de Stalin volverán a hacer sufrir al pueblo boliviano, como ayer hicieron sufrir a la URSS.
5) La justicia comunitaria.- Se constitucionalizarán los linchamientos crueles como los de Achacachi y Ayo Ayo. Volveremos a la barbarie “originaria”. No habrá presunción de inocencia ni debido proceso. ¡Al diablo con el mundo civilizado!
Finalmente, votaré No por Gonzalo Durán, Juan Carlos Serrudo y José Luis Cardozo, los mártires de La Calancha.
El MAS y su constitución pagana, sin Dios ni ley, no necesitan enemigos. Tiene en su propia alma la semilla de la destrucción. No seré yo su cómplice.
http://www.la-razon.com/versiones/20081202_006474/C_246.htm
Este blog ha sido creado para que los paceños nos quitemos el estigma de que somos masistas. LA PAZ NO APOYA AL MAS, La Paz no apoya los afanes totalitarios del gobierno de Evo Morales. Bienvenidos los nuevos lectores: LA PAGINA SE ACTUALIZA DIARIAMENTE