La Constitución Política del Estado (CPE) es una montonera de leyes que tienen que cumplir los gobernantes y gobernados. No soy de los que quiere que el presidente, Evo Morales, haga todas las cosas bien. Me conformo con que únicamente, lo especificado en la CPE, lo haga bien. Lo demás, llámense fiestas, discursos y partidos de fútbol, los puede hacer como quiera.No me interesa que el Presidente sea bueno o malo, ni siquiera todo lo contrario. Es suficiente que sea “chaninchasqa” (justo, en quechua). Si de vez en cuando quiere hacerles una jocha a sus rivales políticos, que se las haga; pero, respetando la CPE. El presidente Morales, para lograr sus objetivos, pone en práctica su habilidad en el bloqueo de caminos, cercar ciudades y en el soborno a paisanos. Si esto lo hiciera un gobernado común, los gobernantes lo acusarían de violar la CPE. Tener amigos es humano. El presidente Morales tiene amigos. Unos son locales y otros son de afuera. A muchos de sus amigos locales les permite manejar el Estado, aunque continuamente demuestren que son peligrosamente ignorantes y corruptos para hacerlo, que no cumplen la ley y que abusan del poder. A los de afuera, sobre todo al que gobierna un país hermano, le aprueba con entusiasta sumisión, que pública y constantemente amenace de muerte a millones de ciudadanos bolivianos. Le aprueba también, con la debilidad del necesitado, que desparrame sus petrodólares para sobornar, comprar y callar a quien le convenga. Si algún boliviano no simpatizante del Gobierno del MAS tuviera amigos como los arriba mencionados, por desobedecer a la CPE ya estuviera arrestado y condenado, sin juicio de por medio, por sedicioso, separatista y traidor a la patria. Parece que la CPE del Tahuantinsuyo estaba basada en tres reglas: no seas flojo, no seas mentiroso y no seas ladrón. Según el historiador Hans Dietrich Disselhoff, el castigo para los nobles, o entorno del Inca, que violaban la ley, era cortarles la cabeza. El Gobierno del MAS quiere volver 500 años atrás. Sin embargo, a la mayoría de sus dirigentes que violan todo el tiempo, por lo menos dos de las reglas básicas del Imperio Incaico, la autoridad suprema, el Sapay Inca, los haría decapitar. Sigamos con H.D. Disselhoff y los incas: “El gobierno más o menos totalitario del Estado reposaba sobre leyes estrictas, que tenían como finalidad asegurar el mantenimiento del poder” -“el Inca era informado por los Tocoyricoc (‘aquéllos que todo lo ven’), inspectores que recorrían el país”-. “Cada funcionario dirigente administraba justicia en su circunscripción”. Todo esto tiene un gran parecido a la CPE que el Gobierno de Morales quiere que se apruebe en un referéndum. Y ahora, el garrotazo: “Los súbditos del Inca comían, pero no vivían en una frívola prosperidad… Existía un abismo entre las condiciones de vida de la minoría selecta de nobles y la de los campesinos, más modestos”. - Saucedo, ¿vos creés que vuelvan los españoles?
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Este blog ha sido creado para que los paceños nos quitemos el estigma de que somos masistas. LA PAZ NO APOYA AL MAS, La Paz no apoya los afanes totalitarios del gobierno de Evo Morales. Bienvenidos los nuevos lectores: LA PAGINA SE ACTUALIZA DIARIAMENTE